Cuando la situación se hace complicada, cuando lo que preveíamos no se cumple, cuando no podemos hacer frente a nuestras obligaciones, … lo que nos produce en nuestro interior es dolor.
Dolor porque no se han cumplido nuestros sueños ni nuestras esperanzas de éxito.
Puede ser debido a nuestro entorno económico que no preveíamos, a nuestra falta de habilidades, a nuestra confianza en las demás personas, ….
Es decir, no se han cumplido nuestras expectativas. Cuando esto ocurre trae consigo mucho sufrimiento. Y queremos librarnos de todo ese dolor y sufrimiento pero no sabemos cómo hacerlo. Nos sentimos atrapados.
Nos hundimos en el barro poco a poco sin saber cómo salir. Cada paso que damos nos hundimos un poco más.
En estos momentos sabes lo que es sentirse totalmente solo ante tu situación. Y no lo dudes, esta situación, tú mismo la has creado. Los miedos y las dudas te invaden sin conocer qué decisión tomar.
¿Porque no haces algo distinto?
Y no me refiero a que trabajes más, cambies la forma de hacer tus negocios o busques negocios nuevos, o que adquieras nuevas habilidades, NO, nada de esto te estoy diciendo.
Me refiero a que hagas algo distinto en ti mismo.
Porque si haces lo mismo que hasta ahora, vas a seguir obteniendo los mismo resultados.
¿Esperas a alguien que venga a solucionar tus problemas? No esperes, de verdad. No esperes a que venga alguien ni que ocurra algo para resolver tus problemas.
No esperes más. Ese alguien que estas esperando ya está aquí, siempre ha estado aquí.
Tú eres la persona que estabas esperando. Tú eres la persona que puede resolver tus problemas.
¿Sabes quién es ese alguien? ¿lo conoces? ¿de verdad que lo conoces?
Pues ese que tú apenas conoces tiene que resolver todos tus problemas.
Siempre ha sido así. Y siempre será así.
Lo que ocurre es que te has perdido, y al perderte también perdiste a ese alguien que ahora estas buscando. Si, te perdiste y se te olvido que tú eres ese alguien que ahora estas buscando.
Despierta, encuéntralo y conócelo. Préstale la atención que se merece. Y ponte a ayudarte a ti mismo. Ahora mismo. Paso a paso
Busca un lugar en tu interior que te dé la calma y tranquilidad que necesitas. Recuerda, tú no eres tus problemas actuales. Tú eras y serás algo mucho más maravilloso que esta situación que ahora estas pasando. Es algo pasajero. Esto tampoco lo dudes.
Y algo muy importante debes saber. El fracaso se olvida. Todos lo olvidan. Y tú el primero. Además, le vas a agradecer a él mucho cuando lo superes, porque te convertirás en una persona mucho mejor de lo que eres ahora.
¿Empieza haciendo algo distinto?
Encuentra primero tu visión. Gírate a tu interior para encontrar tu visión. Sí. Encuentra primero lo que te va a llenar. Encuentra lo que te hará disfrutar haciendo. Encuentra tu visión e inicia tu camino.
¿Cómo sabré que es mi visión? Fácil, vas a apasionarte, a disfrutar haciendo y vas a sentirte alegre en tu caminar. Serás como un imán que traerá hacia ti a las personas que podrán ayudarte y los planes de tu visión se irán cumpliendo, paso a paso, sin casi esfuerzo.
No te harán falta muchos razonamientos sino aceptar y creer en tu visión. Tu visión es muy sencilla de comprender solo te hace falta que tú te vuelvas simple y sencillo, como ya eras tiempo atrás, para poder entenderla y comprenderla. Y no tengas dudas ni miedos porque sabrás cómo empezar a materializarla.
Necesitas empezar a caminar para ir apreciando y cogiendo confianza en tu visión.
Si es verdad,es mi visión,
ahora si, tengo seguridad que esta es mi visión.
Deje una respuesta